Acerca de la actitud de los camaradas de Valladolid circulan por el Partido informes y noticias en absoluto tendenciosas. Nos interesa mucho aclarar cuanto afecta a esa sección, y en nuestro próximo número publicaremos una información detallada, con todos los datos apetecibles, no sólo de su posición actual, es decir, posterior a la ruptura de las J.O.N.S. con F.E., sino también haciendo historia.
Desde luego, adelantamos que tendrá interés la información, porque nadie mejor que nosotros puede hablar de ello, ya que desde el primer día hemos entrecruzado los esfuerzos con aquellos camaradas, hemos asistido a su crecimiento y hemos padecido los posibles errores.
Decimos ya, sin embargo, aquí que el «caso» Valladolid no es singular ni único. Idénticos fenómenos a los allí surgidos a raíz de la ruptura con Falange Española y Primo de Rivera se han dado en otros puntos, pero nos interesa destacarlos con relación a Valladolid, porque allí pueden percibirse en su exacto sentido y allí tienen un relieve más visible.
También adelantamos que las J.O.N.S. tienen muy poco que lamentar respecto al espíritu actual de la sección de Valladolid. Han secundado entusiásticamente nuestra actitud desde el primer día algunos de los mejores y más calificados dirigentes, desde luego los de perfil jonsista más responsable, como hemos de probar. Y se han opuesto asimismo a nosotros quienes lógicamente debían hacerlo. Ha habido actitudes claras, confusas y enemigas. De todas hablaremos.
(«La Patria Libre», n. 5, 16 - Marzo - 1935)